La importancia de nuestros Detectives Privados frente a los software de vigilancia

En la actualidad, los software para vigilar no solamente se encuentran en pleno auge, sino que suponen un serio perjuicio al atentar de forma clara y directa contra la privacidad e intimidad de una persona, ámbito u organización.

Esto representa un mayor problema debido a todos los avances tecnológicos que tienen lugar, cada vez más y en mayor profundidad, con el respectivo desarrollo potenciado de los distintos equipos informáticos, lo que hace que se perfeccionen las técnicas invasivas y además sean muy complicados de detectar.

No obstante, sepa usted que todo este tipo de prácticas de vigilancia malintencionadas son ilegales y de hecho están tipificadas como delito en el art. 197 del Código Penal. En concreto, “vulnerar la intimidad de otro, sin su consentimiento” interceptando “sus telecomunicaciones o utilizando artificios técnicos de escucha, transmisión, grabación o reproducción del sonido o de la imagen”.

Asimismo, también se menciona a quien sin estar autorizado “se apodere, utilice o modifique, en perjuicio de un tercero, datos reservados de carácter personal o familiar de otro que se hallen registrados en ficheros o soportes informáticos, electrónicos o telemáticos”.

Entonces, ¿no es legal en ningún término la instalación de estos programas?

Existen casos extremadamente excepcionales donde se pudiera permitir el uso de este tipo de tecnología y que, al mismo tiempo, respetasen la ley vigente y no vulneren ningún derecho fundamental: bien cuando se dispone de un consentimiento legal por parte de quien será vigilado o bien mediante una autorización judicial, independientemente de los fines para los que sea utilizado.

No obstante, a usted quizá le surjan dudas en el ámbito del control parental en caso de que desee, por ejemplo, monitorizar a un descendiente menor de edad directamente desde su smartphone, incluso si es para prevenirle de riesgos por comportamientos autodestructivos. O en el caso de rastrear el dispositivo móvil de ancianos por temor a su desaparición involuntaria que pudiera ser provocada, en cierta medida, por enfermedades como el Alzheimer.

Pues bien, también en esta tipología de casos, desde Accésit Detectives le recomendamos encarecidamente que no realice este tipo de prácticas con software para acechar. Antes de abordar estas delicadas situaciones, y ante la más mínima duda de sospechas en conductas extrañas, lo mejor es que usted contacte con nuestros Detectives Privados para seguimientos y comportamientos dudosos. Tendrá la tranquilidad de que nuestros profesionales de la Investigación Privada le informarán oportunamente de la auténtica realidad sin necesidad de acometer este nivel de vigilancia exhaustiva sobre allegados o incluso sus empleados.

Confíe en Accésit Detectives frente a estos procedimientos ilegales

Así pues, este software es una práctica totalmente ilegal pero que, debido al desarrollo y progreso cada vez más sofisticado de estos medios, su detección resulta sumamente complicada. En la mayor parte de las ocasiones no es nada sencillo conocer si usted está siendo observado para que, de esa forma, pueda actuar en consecuencia, llevando a cabo las medidas oportunas que finalicen con esta situación.

Por eso, si usted sospecha que está siendo víctima de esta situación, póngase en contacto con Accésit Detectives. No solamente le ayudaremos en su caso, sino que también le asesoraremos durante todo el procedimiento para actuar siempre de la forma más adecuada conforme a su actual situación.

Para obtener pruebas en esta ardua investigación, en Accésit Detectives trabajamos por su seguridad y tranquilidad a la hora de detectar y demostrar, gracias a peritos informáticos, esta vigilancia no autorizada sobre usted. No solamente contamos con la correspondiente Licencia Nº 2202 de Ministerio de Interior y una vasta experiencia en el campo de la Investigación Privada con más de 20 años de trayectoria profesional, sino que disponemos de todos los medios y recursos necesarios más avanzados para demostrar, con absoluta certeza, eficacia, rigor y discreción, si usted está siendo vigilado ilegalmente y cómo debe actuar durante todo el caso.